Restaurante El Jardín de la Sal

El Restaurante Temático "El Jardín de la Sal" nace como proyecto de la tercera generación de una familia salinera. El edificio está perfectamente integrado en el entorno, demostrando cómo intervenir en un Espacio Natural Protegido sin alterar su naturaleza y su entorno visual. La construcción no perturba la sencillez del entorno, destacando el contraste entre el blanco del brillo de la sal y el negro de la piedra volcánica. Esta misma cualidad se desprende de su gastronomía, caracterizada por la sencillez, el amor por el entorno y el conocimiento de las recetas tradicionales con toques modernos. El restaurante es considerado un tesoro gastronómico, emergiendo entre el blanco de la sal y el negro de la lava. La familia Hernández ha impregnado sus valores en el Restaurante, mostrando la supervivencia de un legado familiar, social y cultural relacionado con la actividad salinera. Este legado se refleja en sus platos, donde se aprecia el toque justo de sal que realza los sabores tradicionales de la Isla de La Palma. "Cocina con alma, sentimiento y corazón" es la frase emblemática que preside la cocina, donde un equipo de jóvenes cocineros ha sabido recoger todo el legado familiar relacionado con la actividad salinera tradicional. Los valores que rodean a esta empresa están presentes en cada uno de sus platos. Por otro lado, la cocina del restaurante se ha convertido en un laboratorio para el amplio mundo de la sal. Este lugar sirve como punto de prueba para nuevas líneas de sales aromatizadas, concediendo a la sal un protagonismo no solo en su entorno, sino también dentro de su cocina. Una visita a las salinas de Fuencaliente puede convertir el final de una ruta, donde la brújula siempre marca el Sur, en una experiencia única.